Aguas cristalinas a la espera de turistas

ONU Desarrollo
4 min readOct 14, 2020

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En la isla de Koh Tao hay barcos amarrados y desolados.

“Antes de la crisis de la COVID-19, solía vender pescado a 100 THB (US$3) el kilo, pero ahora incluso a 50 THB (US$1,5) el kilo, no puedo venderlo. Como no hay turistas, mi sustento se ve muy afectado”, dice el pescador Thammanoon Boonsa.

Koh Tao, una pequeña isla en la costa occidental del Golfo de Tailandia, es uno de los mejores destinos para bucear del mundo. Cada año, medio millón de turistas visitan este impresionante lugar. Pero los buenos días parecen un recuerdo lejano. Koh Tao y otras islas se han visto muy afectadas por la pandemia de la COVID-19, lo que afectó drásticamente el turismo y los negocios relacionados.

Muchos pequeños operadores de embarcaciones turísticas han perdido sus puestos de trabajo. Una reciente evaluación del impacto socioeconómico de la pandemia en Koh Tao, realizada por el Proyecto de Iniciativa de Financiamiento de la Biodiversidad del PNUD, revela que la COVID-19 ha tenido un impacto drástico en las pequeñas y medianas empresas, así como en las trabajadoras migrantes. También indica que el 90% de los operadores de embarcaciones han perdido sus trabajos.

Muchos pequeños operadores de embarcaciones turísticas han perdido sus trabajos debido al impacto de la COVID-19.

En la isla hay barcos amarrados y desolados. Lamentándose por la situación, uno de los operadores de botes pequeños en Koh Tao, dice Thavee Buthchui; “Durante los últimos cinco meses, estamos sufriendo mucho. Antes de la COVID-19, ganábamos 2,000 THB (US$64) por día. Ahora, la mayoría de los operadores de barcos que están empleados han perdido sus trabajos y para los lugareños como nosotros, trabajamos por cuenta propia y tenemos nuestros propios barcos, pero no podemos ganar dinero”.

A través de la Iniciativa de Financiamiento de la Biodiversidad (BIOFIN), PNUD Tailandia y con el apoyo de la Fundación Raks Thai y el municipio de Koh Tao, se seleccionaron 200 operadores de botes turísticos registrados para participar en una campaña de financiación colectiva, “Koh Tao, Better Together”. Esto se basa en efectivo por trabajo, donde los recursos recolectados se proporcionarán a los operadores de botes como un salario diario por la recolección de desechos marinos.

Koh Tao, una pequeña isla en la costa occidental del Golfo de Tailandia, es uno de los mejores destinos para bucear del mundo. Koh Tao y otras islas se han visto muy afectadas por la pandemia de COVID-19, lo que afectó drásticamente al turismo y los negocios relacionados.

BIOFIN Tailandia tiene como objetivo recaudar US$ 60.000 durante tres meses, utilizando la plataforma financiera digital de Krung Thai Bank (KTB). Hasta ahora, KTB ha confirmado su apoyo y ha proporcionado el 30% de la cantidad. Como parte de esta campaña, los operadores de embarcaciones también participarán en oportunidades de empleo a corto plazo para trabajar en la recolección de desechos marinos y la limpieza de playas. Esto ayudará a reducir la basura en el océano y ayudará a crear una isla prístina cuando el país se abra al turismo.

La evaluación socioeconómica también indica que el gobierno municipal de Koh Tao enfrenta un déficit presupuestario, debido a gastos de emergencia no planificados, necesarios para responder a la crisis de la COVID-19. “Sin flujo de caja, sin ingresos y el impacto sin precedentes ya han generado estrés, y estamos tratando de ayudar a los empresarios locales a mantenerse en el camino correcto”, dice Chianyan Thurasukul, alcalde de Koh Tao Tambon. “Mientras tanto, estamos elaborando un paquete de estímulo para el turismo interno. Apoyamos el impulso de la limpieza, la seguridad y la comodidad para atraer a los turistas, al mismo tiempo que trabajamos para revivir la belleza natural”.

Se seleccionaron 200 operadores de barcos turísticos registrados para participar en una campaña de financiación colectiva, “Koh Tao, Better Together”. Esto se basa en dinero por trabajo, donde los recursos recolectados se proporcionarán a los operadores de botes como un salario diario por su trabajo en la recolección de desechos marinos.

Además de Koh Tao, el PNUD, junto con el Consejo Nacional de Desarrollo Económico y Social, la Cámara de Comercio de Tailandia, la Autoridad de Turismo de Tailandia (TAT) y la Cámara de Comercio de Phuket, está llevando a cabo una evaluación específica del impacto socioeconómico en el sector turístico y su cadena de suministro en la isla de Phuket. Phuket es una de las islas más visitadas de Tailandia y el 56% de la fuerza laboral trabaja en el turismo.

Este análisis se beneficiará de una evaluación nacional y estará guiada por esta. Sus hallazgos representarán una referencia importante para otros destinos turísticos que enfrentan desafíos similares. Sobre la base de los hallazgos, el PNUD también pondrá a prueba un proyecto de desarrollo de habilidades empresariales a pequeña escala con el fin de apoyar futuras oportunidades de empleo para las personas más afectadas por la crisis. Además del análisis del impacto, las recomendaciones para la recuperación incluyen la reorientación del sector turístico de Phuket, así como enfoques más sostenibles y diversificados para el desarrollo de la provincia.

Estas evaluaciones guiarán el compromiso futuro de promoción de políticas y programas del PNUD y el sistema de Naciones Unidas. El impacto de la COVID-19 puede convertirse en una fuente de muchas lecciones para definir nuevos enfoques de desarrollo que se basan en un mejor equilibrio entre la prosperidad económica y la conservación de los recursos naturales.

Koh Tao, una pequeña isla en la costa occidental del Golfo de Tailandia. Chianyan Thurasukul, alcalde de Koh Tao Tambon dijo: “Estamos apoyando el impulso de la limpieza, la seguridad y la comodidad para atraer a los turistas, mientras que al mismo tiempo también trabajamos para revivir la belleza natural”.

Texto y fotos: PNUD Tailandia

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