“Cuando regresé a la escuela, no podía contener mi alegría”.

ONU Desarrollo
4 min readOct 9, 2019

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Al utilizar una silla de ruedas, Ahmed Al Abani, de 9 años, enfrentó dificultades para hacer cumplir su derecho a una educación de calidad.

Ahmed Al Abani tiene nueve años y vive en Sirt, Libia. Debido a que utiliza una silla de ruedas, él y su familia han tenido que luchar para hacer cumplir su derecho a una educación de calidad.

Aunque ha estado inscrito en la escuela primaria cercana de Al Kholoud desde el primer grado, se enfrentó a desafíos porque su escuela no era accesible para estudiantes con discapacidades.

Su madre, Khairy Hussin, quien enseña en la escuela, hizo lo mejor que pudo, pero la vida de la familia se vio interrumpida cuando estallaron violentos enfrentamientos en la ciudad en 2016.

La familia huyó a Trípoli, y la vida allí no fue fácil. No pudieron encontrar una escuela cerca de su casa, o una que acomodara a estudiantes con discapacidades.

La familia regresó a casa en Sirt tan pronto como fue seguro hacerlo.

“Cuando la guerra terminó en Sirt, regresamos de inmediato”, dijo Khairy. “Mi hijo estaba muy emocionado de regresar a su escuela y ver a sus amigos y maestros”.

La escuela primaria Al Kholoud en Sirt sufrió graves daños debido al conflicto en 2016.

Desafortunadamente, la escuela había sido severamente dañada en los combates. Casi todo había sido saqueado o quemado y las aulas estaban en malas condiciones.

El conflicto dejó solo unas pocas escuelas en Sirt de pie, lo que empeoró el problema del hacinamiento. Varias familias no pudieron encontrar un lugar para sus hijos y se vieron obligadas a irse nuevamente.

Con la escuela cerrada, la familia de Ahmed también tuvo que reconsiderar sus opciones.

“Mi esposo y yo pensamos mucho sobre dónde llevar a Ahmed. Incluso pensamos en volver a Trípoli”, dijo Khairy.

El PNUD y el Servicio de Estabilización para Libia (SFL, por sus siglas en inglés) intervinieron. El SFL es una iniciativa de estabilización inmediata que proporciona una rehabilitación rápida a la infraestructura crítica dañada en el conflicto.

La familia recibió noticias de que la escuela iba a ser rehabilitada y que pronto volvería a abrir. “Estábamos muy felices y llenos de esperanza”, dijo Khairy.

En 2018, la escuela fue reparada con la ayuda del PNUD y el Servicio de Estabilización para Libia,

La Escuela Primaria Al Kholoud fue renovada y entregada al municipio de Sirt en 2018.

Ahmed no solo está de regreso en la escuela, sino que la escuela está mejor que nunca. Además de las aulas rehabilitadas, ahora tiene un patio de recreo techado donde los estudiantes pueden jugar en cualquier momento, incluso cuando llueve.

“La rehabilitación se ha llevado a cabo correctamente y el centro puede alojar estudiantes nuevamente. Están muy felices de aprender en ese entorno”, dijo Meftah Khakis Masood, Director de la escuela.

Lo mejor para Ahmed es que la escuela renovada ha sido diseñada pensando en él.

“Puedo acceder fácilmente a todas las aulas y a diferentes espacios de aprendizaje en la escuela”, dice Ahmed.

“En la escuela, mudarse de un lugar a otro es muy fácil para las personas con discapacidad. Todos los corredores están listos para ellos”, dice el Sr. Masood.

El SFL ha emprendido varios proyectos en Sirt, incluyendo el suministro de ambulancias al hospital Ibn Sina, la entrega de camiones y contenedores de basura, y la renovación de muchas otras escuelas también dañadas en el conflicto.

“Cuando regresé a la escuela, no podía contener mi alegría, especialmente cuando volví a ver a mis amigos”, dijo Ahmed.

En toda Libia, el PNUD está respondiendo a las necesidades urgentes a corto plazo de las personas al tiempo que brinda apoyo sostenible a largo plazo. El objetivo, como fue en la escuela de Ahmed, es brindar ayuda vital inmediatamente, así como sentar las bases para un futuro mejor.

“Cuando regresé a la escuela, no podía contener mi alegría, especialmente cuando volví a ver a mis amigos”, dijo Ahmed. “En el pasado, no podíamos practicar deporte o jugar en el patio de juegos, especialmente en invierno, porque no tenía techo. Ahora, podemos jugar en cualquier momento, antes de ir a clase, o durante las clases de deporte”.

Ahmed también está saliendo adelante académicamente en su nuevo entorno.

“Ahora Ahmed está entre los mejores estudiantes de su clase”, dice Khairy. “Regresa a casa con una cara de felicidad”.

A Ahmed le encanta contarle a su madre cómo pasa sus días, y ahora que puede soñar con el futuro que se merece, tiene grandes planes.

“Me gustaría ser médico cuando crezca”.

Ahmed ahora es el mejor de su clase y sueña con convertirse en médico.

Fotos: Abdeladeem Ajaj / PNUD Libia.

Edición de fotos: Rico Cruz, Pasante de fotografía del PNUD, Nueva York.

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